En el año 1.993-1.994 se hace realidad el sueño de la comunidad SCJ de Tinaquillo: la apertura del centro médico social “San Martín de Porres”, ubicado en la avenida principal de Tinaquillo, frente a la plaza Bolívar, diagonal a la alcaldía de la misa ciudad. Este centro tiene como objetivo la atención de personas, especialmente las más pobres, para ofrecer especialidades médicas a bajo costo, entre otras cosas.
Se compraron los terrenos a principios de los años ´90. El trabajo estuvo a cargo del P. Joaquín Imaz quien amasó la idea y la cristalizó en la apertura. Para esos años se veían buenas posibilidades para la apertura de especialidades médicas en manos de profesionales afectos a la iglesia, de gran corazón y dispuestos a ofrecer sus servicios, sin pensar en el lucro, como de hecho sostienen las normativas del centro médico. Ellos, poco a poco, fueron entregándose y con ello, “S. Martín” fue ganando prestigio.
Las especialidades ofrecidas son: laboratorio y bacteriología; medicina general; medicina familiar; pediatría, oftalmología; otorrino; ginecología y obstetricia; ecografía, etc. Especialidades que por demás, son recurrentes en la lista de necesidades de los pacientes y población de Tinaquillo.
Hoy unos cuantos profesionales quedan prestando su servicio después de catorce años; otros, se fueron a la casa de Dios Padre y otros buscaron mejores caminos, sin embargo, el centro continúa su cometido de prestar servicios médicos sociales.
Es de hacer notar que el centro médico es de atención social. Los costos y gastos son muchos frente a la “supuesta” ganancia que genera. Se pensó siempre en el beneficio de las personas pobres hasta tal punto que en lo primeros años se ofreció el servicio de farmacia, con costo “cero” debido a que algunas instituciones donaban medicinas para los pobres. Este servicio sucumbió ante la burocracia del gobierno que coloca impuestos altos por ingresos de medicinas desde otros países o restringía la distribución debido a permisos sanitarios. Es una lástima que tantas ventajas no puedan ser aprovechadas.
Su santo patrono es San Martín de Porres. Su figura remite a la humildad y servicio que tenía este mulato, fraile predicador, a las personas que recurrían a él pidiendo un pedazo de pan, atención espiritual, inclusive milagros concedidos por Dios en este siervo. De la nada, Dios siempre va sacando cosas nuevas y buenas para sus hijos.
Hoy el centro médico presta servicios de obstetricia, ginecología, ecografía, traumatología, pediatría, laboratorio, laboratorio de bacteriología, óptica, etc. Han aumentado considerablemente los usuarios frente a los servicios públicos existentes en la ciudad de Tinaquillo.
Si tienes alguna sugerencia para ayudar a la Congregación y por medio de este centro, a la gente pobre y necesitada, te invitamos a visitar dicho centro para palpar la dinámica y servicio de estos profesionales y del personal religioso que está a la cabeza.
